sábado, 30 de abril de 2016

La máquina de vapor y la verga del campeón.

La máquina de vapor ya no enamora,
Pobre máquina, se convirtió en un óvulo descartado,
Pero la vida sigue dicen las señoras con ruleros,
En estos tiempos tan finamente gasificados,
Los postrecitos envasados son cada vez más ricos,
Pero los queremos más grandes,
Como la verga del campeón,
Y como la camioneta del petrolero,
Hay un llamado que espero todos los días,
No lo recibo nunca,
Asomé la cabeza por la ventana,
No llovía, pero un árbol se agitaba,
Me hizo pensar que tenía tentáculos,
Y que la atmósfera era un océano invertido,
Viajamos cada vez más rápido,
Las máquinas de hoy son formidables,
Le encantan a cualquiera,
Tarde o temprano esta nave va a descender en el sol,
Se van a quemar sus mares,
Va a estornudar, y va exhalar un suspiro redentor,
No vamos a estar ahí para verlo,
Cada tanto aparecen nuevos amigos y amigas,
Y los viejos parecen máquinas de vapor, son como reliquias,
Puede ser perverso decirlo así,
Y puede ser hermoso también,
Pero aún no recibo el llamado...

No hay comentarios:

Publicar un comentario