lunes, 20 de julio de 2015

Ciudad para morir

Esta es la ciudad de la balacera,
Nuestros criminales tienen una imaginación brutal,
Mueren mujeres todos los años,
Siempre se les ocurre una nueva forma de matarlas,
Si alguien bonito y bueno muere es doblemente feo,
Si es en el centro es tapa del diario,
No mueras en la periferia,
Y si morís ahí,
No pidas justicia,
La gente se cansó de ir a las marchas,
Ahora la peleamos por internet,
Estoy seguro que los asesinos temen entrar a sus cuentas,
Los familiares de las víctimas saben hablar en televisión,
Me sorprende, nunca vieron una cámara,
Pero la muerte te da coraje,
Hoy el terror es noticia,
Pero yo soy inmune,
Porque sólo veo el canal de la música,
Muy malo por cierto,
Voy al baño como quince veces al día,
No está muy limpio,
¿Tendré que cambiar de fragancia?
No tengo tiempo para limpiarlo,
Tampoco estoy muy ocupado,
En el baño siempre me río mucho,
Si matan a uno de mis hermanos,
Tal vez la pase mal también en el baño,
A veces tengo pensamientos que me parecen absurdos,
Son inconfesables, pero me pasan,
Es como si de verdad me preocupara saber que voy a sufrir también en el baño,
Un travesti mató en una clínica el año pasado,
La noticia era más terrible porque era travesti,
Los periodistas no son malas personas,
La matriz mental que produce sus pensamientos parte siempre de la misma pregunta: ¿Qué quiere oír la gente?
La gente es el concepto más complejo que elaboró alguna vez un periodista,
Es como dice mi papá de los jugadores de fútbol,
Te pagan millones por patear una pelotita,
Y tiras el penal afuera,
No sé muy bien qué tiene que ver,
Pero era algo así,
Las van a matar a todas,
Yo soy un blando,
No puedo defender ni un contragolpe de tortugas,
Pero esta es mi ciudad,
Cipolletti, Ciudad para morir vi en un graffitti,
Cuando habían matado a las tres chicas,
Me quedé pensando,
Pero el cipoleño medio es localista,
Le gusta su ciudad como si fuera Springfield,
Yo hace rato me quiero ir de acá,
A Rosario pensé el otro día,
Según las noticias los narcos salen de las baldosas,
Pero qué más da,
Ya probé femicidas,
Probaré narcos,
De algo hay que morirse.

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